Deben haber millones
de secretos
entre las margaritas
que me diste
la primera vez que
discutimos
eran una promesa
que se marchito
a la semana en el florero
yo las acepte
era la primera
de muchas veces que
me llevarias flores
para disculparte
he recibido
tulipanes, girasoles
rosas y petunias
cada una con una lista
de promesas que recitas
usando todas las tonalidades
del arcoiris
y yo me siento como una flor
plantada en la sala
con raices en el sillon
y marchita
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